*Yarela Gómez Sánchez representa al sector social y político que busca cambios transformadores en la Nueva Carta Magna. Desde ya se inclina por discutir de forma inmediata la libertad a los presos políticos de la revuelta de 2019.
“Con Letra de Mujer” fue su acertado slogan de campaña. Tiene un poco más de 30 años, es feminista, miembro de Modatima (Movimiento de Defensa por el acceso al Agua, la Tierra y la Protección del Medioambiente), docente de la red austral pedagógica feminista, parte del Movimiento Aysén Constituyente y de la Lista Apruebo Dignidad, además de otras organizaciones de base, Yarela Gómez Sánchez, defenderá con fuerza la superación del modelo neoliberal en la Convención Constitucional, como representante de Aysén y su gente.
En enero pasado, como parte del Movimiento Aysén Constituyente, firmaste un mandato constituyente soberano, que mantenía ejes tales como feminismo, derechos sociales, culturales y ambientales, nuevo modelo de desarrollo centrado en las personas y plurinacionalidad, entre otros. ¿Qué agregarías a ese compromiso firmado con el pueblo?
“Descentralización es una idea importante de la cual hay que hablar, configuración de la democracia, que sea sólida y efectivamente participativa, con plurinacionalidad, son temas que se cruzan. Para que podamos avanzar en derechos sociales, nueva estructura del estado, debemos abandonar el modelo neoliberal y las lógicas extractivistas y reconfigurar un nuevo modelo de desarrollo social, que vaya en sintonía con la idea de descentralización y participación ciudadana para que sean los propios territorios los que decidan”.
¿Cuál va a ser la relación con las comunidades y territorios de Aysén, pensando que la Constitución debe contener las miradas de la totalidad del país, donde claramente tú representas el sentir de la región de Aysén, con todas sus particularidades?
“Nosotros vamos con un proyecto antineoliberal, formamos parte del Movimiento Aysén Constituyente, pero también estamos convocando a otras organizaciones que van en la misma línea y sentido donde pudiésemos reunir el sentir del territorio, a lo que además sumaremos espacios abiertos de cabildos, donde todos y todas puedan opinar de lo que quieren para Aysén y el territorio, pero pensando en que esta es una construcción nacional. No hay que perder de vista eso. Lo que vimos en campaña es que van en la misma línea del proyecto que estábamos levantando, es decir, superar la lógica de la mercantilización de los derechos y que todo pasa por el mercado y trabajar de manera más colectiva”.
¿Cómo esperas convencer a los sectores que quieren mantener la actual Constitución o aquellos que prefieren hacerle solo reformas estéticas al modelo, pensando que el pueblo quiere un cambio estructural, como lo demostró en las urnas?
“Nosotros no nos cerramos a conversar, algunos sectores han generado la idea que en la izquierda no queremos sentarnos a hablar con nadie y queremos imponer ideas y no es así, vamos a hablar con todos, incluyendo estos sectores extremos en sus posiciones. Lo que tenemos a nuestro favor y con lo que vamos a persuadir, es que son los territorios los que van a plantear los temas que se han venido desarrollando hace al menos 15 años, por lo tanto, hablaremos de todas las demandas sociales que se han instalado desde la Revolución Pingüina en adelante, donde existe un diagnóstico y hay un trabajo de sistematización de cabildos. Por lo tanto, contamos con la experiencia del territorio, con colectivos y agrupaciones que levantan esas inquietudes y vamos a conversar desde la experiencia social y no del dogma. Y estos grupos que son minoritarios, pero que son parte de la Convención, van a tener que ceder privilegios. Si quieren mantener el mismo statu quo que se ha venido desarrollando va a ser bien difícil que podamos tener alguna conversación que sea fructífera. Las grandes mayorías sociales están señalando un camino distinto a lo que ellos están planteando”.
Yarela. ¿Has tenido reuniones con otras listas y sectores distintos al tuyo en estos días?
“Hemos tenido hartas reuniones. Primero en el espacio que nos convoca que es la lista Apruebo Dignidad, nos hemos organizado, pero también en otras organizaciones donde participo, como MODATIMA, con las convencionales, al igual que en los espacios feministas, somos hartas en esa línea. También con constitucionales indígenas, porque soy mapuche. Y también en el territorio en el Movimiento Aysén Constituyente, delineando estrategias regionales que puedan ampliar la convocatoria y esta semana me reúno con Tomás (Laibe) y quizás desarrollar algo en común”.
¿Cuál será la fórmula para logar la máxima participación posible y cómo harás para mantener el contacto permanente con el territorio?
“Para que los procesos realmente funcionen, nosotros vamos a hacer todo lo posible para que exista participación ciudadana. Hay que participar, superar la lógica de descansar en los representantes, porque lo que nos jugamos es una nueva forma de hacer democracia. Vamos a sumar todas las fuerzas para que en el reglamento queden un proceso vinculante participativo y si eso no sucede, también desarrollaremos el trabajo territorial, porque es desde esas bases que se levanta la candidatura, que es la única de las tres que congrega a más de una organización política y no política. El llamado es a estar atentos y atentas, a no dejarse engañar por las fake news (noticias falsas), que están haciendo con los convencionales constituyentes, con temas que no han dicho y justamente por los que van en listas más transformadoras. Vamos a establecer canales para distribuir información, pero también para que ésta se devuelva, con un proceso de retroalimentación”.
Finalmente ¿eres partidaria de darles libertad a los presos políticos de la revuelta de octubre de 2019?
“Desde la primera sesión debe conversarse la libertad a los presos políticos de la revuelta, porque estamos generando cárcel para aquellos sectores que permanentemente han sido los más marginados y excluidos de la política y cuando se manifiestan le dan cárcel, pero tenemos casos de corrupción de financiamiento irregular de la política y otras, donde reciben clases de ética y acaso una firma mensual, pero llevamos a la cárcel a jóvenes, el mensaje es que el que se manifiesta cae preso y eso no nos parece como lista Apruebo Dignidad”.